La historia del nombre de JYSK: un viaje de 42 años
Este mes, DÄNISCHES BETTENLAGER cambia su nombre por el de JYSK en Alemania, lo que significa que todas las tiendas JYSK compartirán el mismo nombre. Pero ¿sabía que JYSK no tenía ese nombre en sus inicios?
En 1979, Lars Larsen, el fundador de JYSK, dio el nombre de JYSK SENGETØJSLAGER (cuya traducción sería «almacén de camas JYSK») a nuestra empresa. Larsen pensó que este era el nombre perfecto para su concepto, tal como señaló en su autobiografía. «Almacén» implicaba algún tipo de descuento, «camas» hacía referencia al producto principal de esa época y «Jysk» es la expresión utilizada para referirse a los habitantes de Jutlandia, en Dinamarca, una región que tenía fama de fiable en el resto del país.
Sin embargo, se encontró con un problema inesperado con varias agencias de publicidad, que insistían en que el nombre de una empresa tenía que ser corto, con 4 o 5 letras como máximo. La primera tienda de Aarhus, en Dinamarca, no se abrió hasta el momento en el que Larsen encontró una agencia de publicidad con un nombre todavía más largo y que aceptó utilizar JYSK SENGETØJSLAGER.
Tras cambiar el nombre de la empresa a JYSK, Larsen señaló en su autobiografía que, irónicamente, las agencias de publicidad acabaron teniendo razón acerca de la longitud del nombre.
Cómo traducir el nombre
Cuando JYSK SENGETØJSLAGER alcanzó el éxito en Dinamarca, Lars Larsen decidió expandirse a otros países, siendo Alemania el primero de ellos, pero de nuevo surgió un problema en relación con el nombre.
«Sabíamos que los alemanes no conocían la palabra “Jysk”, pero también sabíamos que asociaban un país como Dinamarca con alta calidad», afirma Carl Erik Stubkier, que ha formado parte del departamento de Marketing de JYSK desde sus inicios.
Así que, en 1984, antes de abrir la primera tienda en Alemania, Lars Larsen y su equipo decidieron cambiar «JYSK» por «Danés», y se utilizó el nombre DÄNISCHES BETTENLAGER.
Un único nombre en todo el mundo
Con la apertura de la primera tienda en Suecia en 1991, decidieron mantener la palabra «JYSK», mientras que el resto del nombre se tradujo, por lo que se convirtió en JYSK BÄDDLAGER, y a partir de ese momento mantuvieron este método en cada nuevo país.
«Cuando empezamos a expandirnos a Polonia en el año 2000, volvimos a pensar en el tema del nombre. Nos dimos cuenta de que no podíamos seguir cambiando el nombre para cada país», señala Carl Erik Stubkier.
«En la mayoría de los países, las tiendas ya cuentan con el nombre JYSK. Por lo tanto, tenía sentido reunir todas las tiendas bajo un solo nombre: JYSK», añade.
Finalmente, todas las tiendas compartirán el nombre cuando las últimas tiendas de Alemania adopten el nombre de JYSK el 27 de septiembre.